Cuantas risas quedaron por el camino.
Unas enterradas en el baúl de los recuerdos.
Antes vistas de lejos y ahora olvidadas por doquier.
Ninguna de ellas supo lo que la otra le contaba.
Todas ellas distintas,todas ellas genuinas.
Otras surgieron de llantos por que así de incomprensibles somos.

Donde quiera que vaya siempre la veo,ajena a mi.
Un día la atraparé o me atrapará ella en su red.
Entonces como dos al unísono contaremos experiencias.
Los dos convertidos en un único ser.
El espacio que antes ocuparon los llantos serán ahora risa.

A través de ella curaré todos los males,los de la mente y el cuerpo.

Viviré y viviremos en un mundo distinto a este.
En donde los gatos hablan y los sombreros están locos.
Con las horas perdidas y todo el espacio ante nosotros
Escribiremos poesía para desnudar nuestros corazones y decir.
Soy.