UN TRANVÍA LLAMADO DESEO

La conocí un día cualquiera pues uno nunca elige cuando conocerá su destino.
Lo primero que vi fueron sus ojos,dos pedazos de almendra que me observaban tímidamente escudados por un libro de Asimov,que con sus tapas azul osuro contrastaban y le daban a esos pozos un brillo inusitado,casi expectral.
Y es por ello que me quedé como un tonto mirando sus ojos durante lo que al parecer fueron minutos.Finalmente su voz me sacó de mi hinopia.
-¿Le gusta?
-¿Perdona? Repliqué.
-Asimov,que si le gusta...
-Es mi escritor favorito de ciencia ficción comenté con una gran y genuina sonrisa.
Las siguientes dos horas que permanecimos en aquél tranvía llamado deseo las pasamos hablando animadamente de libros,ficción y fantasía y en un momento dado incluso de deseo.Pero de momento era otro tipo de deseo,hablamos de anhelos,de objetivos por cumplir y del por qué nos habíamos enrolado en un viaje en tranvía recorriendo Europa.
Yo esperaba seguir hasta Holanda pero me hizo sentir tanto y tan bien que supe que mi camino acababa donde terminase el suyo así que por primera vez en nuestra charla le mentí y cuando me contó que se dirigía a Bruselas y permanecería allí un tiempo le dije que yo también.

El tren marchó y con él se fue la opresión que venía sintiendo desde que,dos meses atrás,mi pequeña Jezzabell me abandonara. No entraré en muchos detalles pero basta decir que con su marcha creí extinta mi capacidad para amar.Incluso para sonreír he de decir. Pero todo cambió en esta tonta tarde en que gracias a Salma,pues ese era su nombre,pude reír y llorar,pero llorar de alegría y de risa. Tal era su espíritu indomable.

Con ella se derrumbó mi defensa impenetrable,aquella que me había auto impuesto para no volver a sufrir. Por primera vez en dos meses me sentía vulnerable,pero también risueño y esperanzado.

-Me hospedo en el Jade Esponjoso,ya tenía la reserva hecha,¿serías tan amable de acompañarme? Su pregunta me volvió a sacar de mi ensoñación,algo que debió de advertir pues soltó una pequeña carcajada.

-Por supuesto,yo la verdad no tengo reserva alguna así que quizás siga tu camino y busque una habitación disponible.

Nos pusimos a andar,poco sabía yo entonces de que acabaríamos compartiendo cama,casa,vida y muerte. Pero bueno,eso se narrará en siguientes capítulos,creo que es importante que antes de mi final os cuente cómo fue mi principio,mi vida junto a la mujer que me rescató de mi mismo y me apoyó hasta convertirme en escritor,poeta y ante todo,persona.

Como os comenté todo empieza en un tranvía llamado deseo y de ahí el título del libro de mis memorias. Pero ahora es momento de que os relate la peor época que pasamos en Bruselas. Es ésta una historia de engaños,amores despechados,persecuciones y asesinato.

Para que entendáis un poco la situación he de hablaros un poco de Salma y de lo que hablamos en el compartimento del tranvía.

Entre esos pozos de sabiduría que son sus ojos yacía un cerebro igual de bello que éstos.

Era astrónoma y tenía muchos conocimientos sobre ingeniería y es por ello que se dirigió a Bruselas pues en dos días acontecía una convención Europea sobre el tema y ella era una de los ponentes.Os podéis imaginar que a muchos de sus colegas de profesión,todos ellos varones,no les hacía ninguna gracia.

Llegamos al hotel y Salma me pidió que le ayudase a subir las maletas y por supuesto yo concedí.Creo que en ese momento ya sabía que no pediría ninguna habitación para mi pero no quería creerlo así que subimos a la habitación y no se muy bien como explicarlo.

Ese día le echamos un pulso al deseo y lo vencimos.Sus manos se clavaron en mi espalda y mis dientes se hincaron en su cuello y el éxtasis producido por ambos,flotaba en el ambiente,casi se podía palpar.Ese fue sin duda para mi el segundo momento de mayor gozo jamás vivido.

Tras una buena ducha conjunta donde repetimos hazaña,concluimos que la cama era lo suficiente mente pequeña para que tuviésemos que dormir juntos y con ello la idea de habitar en otro lugar dejó de existir.

Pero cuando se sube mucho,la caída es aún más dolorosa y,al día siguiente,conocimos la fatalidad. Ésta tenía nombre y era de varón,su nombre era Jean Pierre. Un estirado "gabacho" del sur de Francia,que no sólo era el ex de Salma,sino que además venía en representación de otra empresa de astronomía,e iba a ser rival de ella en la ponencia.